Desde el confinamiento por efectos de la pandemia mundial del covid 19, se han reportado diferentes actos de huaqueos e invasiones de recintos arqueológicos en el Perú. Esto es así debido al estado de abandono en que se encuentran dichos lugares, ya que todos los programas de investigación en diferentes sitios arqueológicos de estudio; así como el personal de seguridad de diferentes lugares, fue suspendido ante la pandemia. Y ciertamente, el confinamiento de la población hace que dichos lugares se vean expuestos ante el repliegue del personal del Estado y de la misma población. Esta situación se agrava ante la inexistencia de cercos perimétricos de protección en la mayoría de recintos arqueológicos de todo el país. Apenas existen en algunos casos unos pequeños muros pintados de color azul de 2 x 3 mts aproximadamente, con el título del ministerio de cultura. Pero ante la falta de límites o linderos los vecinos de las zonas y otros van invadiendo progresivamente los terrenos.
Urge el asumir planes de protección de emergencia ante la destrucción y saqueo de diferentes agentes delicuenciales entre huaqueros, mafias de traficantes de terrenos para vivienda, zonas agrícolas, yacimientos mineros informales clandestinos, entre otros. Estos son los principales riesgos que afectan a los bienes culturales monumentales en las diferentes provincias o regiones del país. Y de no hacer nada al respecto se habrá perdido para siempre mucha de la riqueza cultural con todos sus misterios.
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